
Congreso científico en Cancún... lugar poco adecuado para ello habida cuenta del riesgo de confusión y desorden. Los elegantes pelícanos dejan paso, tras el anochecer caribeño, a una intensa vida nocturna en la que el Coco Bongo es referencia mundial (para la CNN, "the planet's ultimate nightclub"), y en la que habitan mexicanas que parecen francesas, gringas que semejan españolas, "spring bakers" evadidos y un largo etcétera de especies que beben de la noche. Demasiado complejo para procesar conclusiones apodícticas.
Y siempre, la playa infinita reclamada por las olas.
Algún día nos haremos piratas. ¿O ya lo somos?
1 comentario:
Me gustan los puntos suspensivos que escribes después de "Cancún". ¡Ay, los puntos suspensivos! ¿Qué esconden?
Publicar un comentario