
Un hueco en mi agenda me ha permitido visitar el Museo Sorolla, en el madrileño Paseo General Martínez Campos.
Su luminismo y costumbrismo se encuentran bastante alejados del mundo abstracto y metalingüístico del jojufismo, pero también poseen una indudable belleza, pausada y figurativa, incluso poética.
Ilustra este post su obra "Paseo a orillas del mar", plena de luz, color y movimiento.
El jojufismo, por supuesto, seguirá indagando en la esencia de la belleza para algún día, tal vez, extraer ciertas conclusiones.
1 comentario:
Y yo que creía que el jojufismo ya tenía claras sus conclusiones acerca del concepto "belleza"...
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